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Mi bandera, nuestra bandera

Corría el año 1984, el lema del PSOE, “OTAN de entrada No” , se había convertido en OTAN, de salida tampoco. Los votantes del PSOE, andaban perdidos por la decisión de la jerarquía del partido, vergonzantes continuaban diciendo que estaban en contra de la OTAN y lo estaban, aunque terminasen obedeciendo a aquel encantador de serpientes llamado Felipe González y luego resultase difícil encontrar a alguien que hubiese votado a favor de la OTAN. A su izquierda, tras el estrepitoso descalabro electoral del PCE, Carrillo y los suyos, llamados “carrillistas”, habían salido del mismo por la puerta de atrás, formando el PTE, que terminaría integrándose en el PSOE, anteriormente habíamos salido del PCE aquellos que no estábamos de acuerdo con la claudicación de Carrillo y su reconversión a la monarquía, su intento de hacer el PCE, un partido socialdemócrata y lo que es y fue peor, su intento de monarquizar a los republicanos que habíamos participado en las luchas de la clandestinidad. La UCD, había corrido igual suerte que el PCE, siendo sustituida por la extrema derecha franquista liderada por el ministro de Franco, Manuel Fraga, llamada entonces Alianza Popular.

Durante la gran manifestación anti-OTAN de 1984, sede AP

Yo que tenía y todavía conservo una bandera republicana, acudía con ella a las manifestaciones desde 1977, con el escudo bordado a mano posteriormente en 1982. La presencia de aquella única bandera tricolor provocaba por un lado curiosidad, por otra admiración y adhesión, pero también críticas de muchos de aquellos manifestantes que eran fieles al catecismo de Carrillo, pronto acudían los miembros de seguridad del PCE a decirme que la guardase, que el camarada Carrillo así lo quería, la presencia de mi madre, de más de setenta años aplacaba los ánimos y yo seguía ondeando alegremente mi bandera; No obstante me veía desplazado al grupo que formaba el MC, LCR, ORT y otros grupos extraparlamentarios, y demás, donde tampoco nadie llevaba bandera republicanas, luego vino la formación del PC. más tarde PCPE, pero tampoco ondeaban banderas de la República y ponían en algunos casos, pocos, que fuese coronada por la corona mural del escudo constitucional de la República . Mi bandera, en muchos casos y en la mayoría de las manifestaciones era la única bandera tricolor que ondeaba alegremente durante todo el recorrido. Quienes participaban en aquellas primeras manifestaciones tal vez recuerden aquel joven que casi siempre iba al lado de una anciana con dificultades para andar, esa anciana era mi madre, una luchadora comunista que nunca negó sus ideales y que inculco en mí las ganas de lucha por un mundo mejor.

Con  mi madre y mi tío en la manifestación de Valencia preparatoria de la de Madrid anti-OTAN
Esa bandera, comprada en los almacenes España, ya desaparecidos, durante mucho tiempo fue la única, posiblemente hoy en día ondeen en cualquier manifestación más banderas republicanas que entonces en toda España. Las banderas constitucionales de la República se ven y se multiplican de una manifestación a otra, en aquellos años, rara era la manifestación en la que aparecían y siempre había alguien que le ponía pegas a su presencia. Hoy en día no se concibe una manifestación popular donde la bandera republicana no ondee de manera masiva porque es la bandera popular, la del pueblo, la que sale a reivindicar los derechos de los trabajadores, la de la lucha por la libertad, la monárquica solo aparece en las manifestaciones de la extrema derecha, la popular, la del pueblo, es mi bandera, nuestra bandera, la bandera de la República y si nos ponemos tozudos puede que pronto comience a ondear en los ayuntamientos, en los ministerios, en la plaza Colón y sobre todo en el Congreso y en el Palacio de la República, para eso hay que desplazar a estos políticos corruptos y decadentes que han arruinado España.

Paco Arenas



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