En noviembre de 2011 el rey Juan Carlos I ordenó la transferencia de dos millones de euros a su amiga Marta Gayá con el propósito de que tuviera "un nivel de vida decente".
En una nota interna a la que ha tenido acceso "Vozpópuli", Arturo Fasana, el gestor de la fortuna del rey emérito en Suiza lo dejaba establecido: "el cliente de esta cuenta me ha trasladado su preocupación sobre una amiga suya con pocos recursos financieros".
El escrito añade: "esta persona (Marta Gayá) tiene pocos recursos financieros y no muchos ingresos debido a su edad (68 años). Él desea, por tanto, asegurarla un nivel de vida decente y ayudarla financieramente".
Farsana, en aquel momento presidente de Lucum desde la constitución de esta fundación tres años antes, indicó que "para asegurar su tren de vida durante los próximos años", el rey emérito deseaba "hacerle un regalo de dos millones de euros". Asimismo, explicó que el primer millón se pagaría en 2011 y el siguiente, en "el transcurso de 2012".
La beneficiada Marta Gayá se personaría en las oficinas del Banco Mirabaud de Ginebra el 18 de Noviembre de 2011 donde se le entregó un cheque por la cantidad de un millón de euros.
El citado medio apunta a que el pago del segundo millón no llegó a realizarse porque Lucum fue disuelta tras el escándalo de Botsuana y los 65 millones de euros que restaban en el depósito fueron transferidos a Corinna Larsen.
Equipo de redacción de Eco Republicano.
