El expresidente del Gobierno, Felipe González, ha visitado el estudio de la emisora Onda Cero en su 30 aniversario donde ha conversado con Carlos Alsina en el espacio Más de Uno sobre los cambios que se han producido en nuestro país desde que fuera presidente del Ejecutivo o los acuerdos del actual PSOE con ERC y EH Bildu en materia de presupuestos.
El veterano socialista también ha tenido palabras para contestar a los argumentos de la portavoz del grupo parlamentario socialista en el Congreso, Adriana Lastra, cuando en ocasiones alude a la edad y defiende que ahora es una nueva generación la que lleva las riendas del partido y del país.
En este punto Felipe González aseguró es «absolutamente imprescindible» en política que la gente tenga capacidad para opinar y considera que el argumento de «apártate que me toca a mí» es pobre y delatan que no se es "socialista". A juicio del expresidente «alguna gente de mi edad, para solucionarlo, le dan la razón, la tengan o no». Y añade: «Hay gente que oculta su falta de ideas tras una coraza ideológica principista detrás de la que no hay nada, sólo el vacío de ideas. No es progresista querer romper España o dividirla, ni es progresista ni es de izquierdas. Se puede considerar reaccionario tanto si lo expresa alguien desde la derecha como desde la izquierda».
Asimismo mantiene: «No represento a nadie ni lo pretendo, pero a mí nadie me va a callar» «Si alguien me manda callar diciendo que es socialista, yo sé que no es socialista». Y aclara que no se trata de un problema de edad, «hablo cuando tengo que hablar». El expresidente ha admitido su desapego respecto a la actual dirección del PSOE. «Siento orfandad", ha dicho, "ahora hay cosas que no entiendo y eso me produce inquietud y orfandad representativa».
Sobre las mayorías del ejecutivo de Pedro Sánchez.
El antiguo líder del PSOE se ha mostrado muy crítico con las mayorías del Congreso que está conformando el Ejecutivo de Pedro Sánchez y ha advertido de que no se puede construir un "proyecto de futuro" en España como "Estado nación" con partidos como ERC y EH Bildu, partidarios de que "se desguace" el país "con supuestos derechos autodestructivos de autodeterminaciones".
A su juicio, estos dos formaciones quieren "acabar con España" y, por ello, no se les debe tener en cuenta a la hora de construir un horizonte a medio y largo plazo. "Yo no aceptaría su capacidad de interlocución porque va en dirección contraria de lo que pienso que es un proyecto de España democrático descentralizado y europeísta" añadió.
González ha insistido en que la Constitución no excluye a nadie aunque las ideas de alguna fuerza política sean "francamente inconstitucionales". Pero ha puntualizado: "Quien saca votos para estar representado en el Parlamento tiene indiscutible legitimidad, pero la pregunta es si se está dispuesto a pactar con una fuerza política que pretende llevar el proyecto compartido que es España a su desaparición". "Mi respuesta", ha recalcado González, es "no".
Equipo de redacción de Eco Republicano.