Por Eco Republicano
Este viernes primero de octubre se cumplen 90 años desde que, en 1931, las mujeres obtuvieron el derecho al voto en España durante la II República Española.
El presidente del Partido Popular, Pablo Casado, desde Cartagena habló sobre esta efeméride del sufragio femenino: «La izquierda se quiere apropiar de cuestiones históricas que no le corresponden. En esos debates parlamentarios, en esos años, el partido socialista no apoyaba el sufragio femenino. No hay más que leer el diario de sesiones de la diputada Victoria Kent, para recordar lo que decía, sobre porqué las mujeres no debían votar».
El veterano periodista de la Cadena Ser, Isaías Lafuente, no dudó en responder al líder de la oposición: «Vamos a ver, Pablo Casado. Kent no era del Partido Socialista. Su líder, Largo Caballero, votó por 3 veces el sufragio, como la mayoría de sus diputados. Fueron los liberales quienes dieron la espalda a Campoamor. Y Franco, que tuvo como ministro a Fraga, dinamitó todo aquello».
El periodista añadió: «Y, por cierto, cuando descubra Pablo Casado que Clara Campoamor, directora general con Lerroux, abandonó el partido cuando este pactó con la derecha de la CEDA y solicitó después entrar en Izquierda Republicana, que formó parte del Frente Popular, le dará un síncope».
No es la primera vez que Isaías Lafuente corrige a un político sobre este asunto, en el mes de septiembre el periodista aleccionó al director de la Oficina de Español de Ayuso, Toni Cantó, quien argumentó que los socialistas se opusieron al voto femenino.
El PSOE no voto en contra del voto de las mujeres.
Uno de los argumentos que se repiten como un mantra, año tras año, es que los diputados del PSOE votaron en contra del voto femenino. Pero no es cierto.
Tal y como sostiene, Isaías Lafuente, el PSOE no votó en contra, de hecho, la participación de este partido fue fundamental, ya que aportó más de la mitad de los votos favorables para la aprobación del artículo que recogía el sufragio activo de la mujer.
El 1 de octubre de 1931 en las Cortes de la II República se concedió el voto a la mujer y el sufragio universal para los mayores de 23 años, según viene recogido en el Diario de Sesiones del Congreso de ese día.
El resultado de las votaciones fue de 161 votos a favor frente a 121 votos en contra. Además los votos fueron nominales, es decir, se conoce el nombre de los/as diputados/as que votaron a favor y quienes en contra. Atendiendo a los resultados, de los 161 votos a favor, 85 fueron de los socialistas. Mientras que los 121 votos en contra, no hubo diputados socialistas que votaran en contra de esta medida.
Posteriormente, el día 1 de diciembre de 1931, los diputados del Partido Republicano Radical Socialista, Antonio Cañizares Penalva y Victoria Kent Siano, presentaron una enmienda para modificar el artículo 36 sobre el sufragio femenino proponiendo que se retrasara su aplicación hasta la celebración de dos elecciones municipales.
La enmienda fue rechazada por 131 votos frente a 127. De los 131 votos en contra, 74 votos eran de diputados socialistas que representaron el 56%. Tan solo un diputado socialista votó a favor de la enmienda de retrasar el sufragio femenino.
Tras esta votación, el derecho al sufragio femenino fue aprobado finalmente por las Cortes Constituyentes el 9 de diciembre de 1931. De esta forma, gracias al apoyo de los diputados y diputadas socialistas, las mujeres pudieron ejercer el derecho al voto en las elecciones municipales celebradas el 23 de abril de 1933 y en las elecciones generales celebradas el 19 de noviembre de 1933.