Eco Republicano
Blas Infante Pérez de Vargas (1885-1936) fue un destacado político, abogado y escritor andaluz, considerado uno de los padres del andalucismo y un ferviente defensor de la identidad cultural y autonomía de Andalucía en España.
Infante desplegó un intenso activismo en favor de los derechos y el reconocimiento de Andalucía como entidad histórico-cultural única, luchando por el autogobierno y la dignidad de la región. Es famoso por ser el autor del himno de Andalucía, "La bandera blanca y verde", y también por su papel en la promulgación del Estatuto de Autonomía de Andalucía en 1936, que establecía la autonomía de la región antes de la guerra civil española.
Trágicamente, Blas Infante fue arrestado y ejecutado por los militares golpistas en los inicios de la guerra civil. Su legado persiste como un símbolo de la lucha por la identidad y la autonomía regional en España, y su figura es honrada en Andalucía como un ícono cultural y político.
Aquí os dejamos algunas de sus frases y pensamientos del político andaluz:
«Gobernantes que sean maestros. Estado que sea escuela. Política que sea arte de educación».
«Andalucía necesita de su juventud, pero de la juventud honrada , de la juventud trabajadora, de la que pone sus ideales fuera del camino trillado por la vulgaridad».
«Andaluces de todos los campos y partidos; venid a esta labor, los hombres de ideas más opuestas, unidos por el ideal de una Andalucía grande y redimida».
«Yo tengo clavada en la conciencia desde mi infancia, la visión sombría del jornalero. Yo he visto pasear su hambre por las calles del pueblo, confundiendo su agonía con la agonía triste de las tardes invernales».
«Campesinos andaluces, no emigréis, combatid».
«Andalucía jamás espiritualmente fue un pueblo servil».
«El único infierno es el dolor inútil. El dolor fecundo es aquel que afronta animoso, combatiendo contra el dolor ajeno».
«La crisis actual antes que crisis política y crisis económica, es crisis humana. Es crisis de humanidad».
«La bandera andaluza, símbolo de esperanza y de paz que aquí hemos izado esta tarde, no nos traerá ni la paz ni la esperanza ni la libertad que anhelamos, si cada uno de nosotros no la lleva ya plenamente izada en su corazón».
«Andalucía necesita de su juventud, pero de la juventud honrada , de la juventud trabajadora, de la que pone sus ideales fuera del camino trillado por la vulgaridad».
«Se mata a un hombre, pero no se puede matar una idea».
«¡Viva Andalucía libre!, ¡Viva Andalucía libre!», sus últimas palabras antes de ser fusilado.
