Según como adelantaba esta mañana de miércoles El País, el Ejército de Tierra podría sancionar disciplinariamente a los legionarios que fueron fotografiados el pasado sábado con botellines de cerveza y sus armas reglamentarias en el suelo de la terraza de un bar de Vilafranca del Penedés en Barcelona.
En este caso, la responsabilidad más directa recaería en el capitán que permitió que los legionarios bajasen armados y no ordenó que los subfusiles quedasen en los vehículos bajo custodia, contraviniendo así el código disciplinario de las Fuerzas Armadas donde se especifica y considera como falta grave “consumir bebidas alcohólicas durante un servicio de armas o portándolas”.
De esta manera, la cuestión disciplinaria se centraría en determinar si todos o algunos de los legionarios que aparecen en las fotografías y que aunque no cumplían un servicio de armas, ya que volvían de unas maniobras en Francia, sí portaban subfusiles, consumieron alcohol.
Por su parte, la ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles ha dejado la investigación del caso en manos del jefe del Ejército de Tierra, general Francisco Javier Varela, lamentando su utilización por parte de partidos políticos catalanes como Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) o Junts per Catalunya así como EH Bildu que han pedido su comparecencia ante la Diputación Permanente en el Congreso para dar explicaciones sobre el suceso.
La imagen de los militares que causó gran estupefacción entre los vecinos de Vilafranca del Penedés se convirtió en viral provocando todo tipo de reacciones en las redes sociales. El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, ironizaba en su cuenta de twitter : "seguro que después de la cerveza el rifle automático pesa menos".
Equipo de redacción de Eco Republicano.
Seguro que después de la cerveza el rifle automático pesa menos. pic.twitter.com/OOS9fE5CDR— Gabriel Rufián (@gabrielrufian) 28 de septiembre de 2019
